La Pampa fue el escenario de la culminación de la primera etapa del gasoducto que une Vaca Muerta con Salliqueló. La obra permitirá el ahorro de alrededor de "3 mil o 4 mil millones de dólares anules en importación de gas". La inauguración está prevista para el 20 de junio.
La provincia de La Pampa fue el escenario del final de una de las obras más relevantes de los últimos 30 años: el Gasoducto Néstor Kirchner, cuya primera etapa culminó esta tarde con la soldadura que unió los tramos 1 y 2 de esa obra que permitirá revertir el déficit energético que durante años obligó a la Argentina a importar gas.
El presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Sergio Massa, encabezaron ese evento “histórico” en que los operarios concretaron la fusión que completó los 573 kilómetros de longitud de la obra que une localidad neuquina de Tratayén, que toma el sistema troncal del yacimiento de Vaca Muerta, y la bonaerense de Salliqueló.
Esa última soldadura tuvo lugar en el kilómetro 232 de la traza del gasoducto, a la altura de la provincia de La Pampa, donde se unen dos de los tres tramos en que se dividió y se adjudicó la obra. Y de esta manera se dio luz verde a su inauguración prevista para el próximo 20 de junio.
"Es una obra que tendría que haber comenzado en 2018", dijo el titular de Hacienda y destacó que para el desarrollo del gasoducto fueron centrales los fondos obtenidos por el Impuesto Solidario a las Grandes Fortunas. "Nos da la oportunidad de dejar de importar un recurso que la Argentina tiene en su subsuelo", subrayó.
Lo que comenzará a partir de ahora serán las pruebas hidráulicas a las que se somete este tipo de ductos para constatar posibles pérdidas o fisuras. La técnica se realiza por tramos y quedará a cargo de Techint, Sacde y BTU en los tres frentes de obra y bajo la supervisión de la estatal Energía Argentina (ex Enarsa), que es la contratista de obra.
El presidente Alberto Fernández calificó al día de hoy como “muy importante" por la conclusión de esa obra, “la más importante en dimensión y consecuencia" desde el gobierno de Raúl Alfonsín.
Desde esos años "no se construía una obra tan importante", que "permite ahorrarnos 3 mil o 4 mil millones de dólares anules en importación de gas", destacó el mandatario.
A partir de esta inauguración el próximo mes, se prevé que el gobierno nacional anuncie la licitación de la segunda etapa del gasoducto. Para ello se explorarán fuentes de financiamiento de Brasil y se invitará a participar al sector privado.
Los números del gasoducto
Por su parte, Massa había recalcado que la finalización del gasoducto sería uno de los más grandes aportes del sector energético y ponderó que su puesta en marcha permitirá morigerar el impacto de la sequía y "ahorrar 1.900 millones de dólares en lo que resta de 2023".
Para el titular del Palacio de Hacienda se trata de un “hecho histórico” por su significado “en términos de ahorro de importación de energía”.
La construcción del gasoducto y sus obras complementarias requirieron de la fabricación de 56.700 tubos con costura, de 12 metros de largo y unos 5 mil kilos cada uno. Fueron curvados y soldados en la planta de Tenaris ubicada en la localidad de Valentín Alsina, Lanús.
Esta primera etapa de la obra que tiene fecha de entrada en operación el 20 de junio se extiende desde la planta de tratamiento de gas en la localidad neuquina de Tratayén, hasta la otra cabecera en Salliqueló en la provincia de Buenos Aires. Permitirá sumar una capacidad de evacuación de 11 millones de metros cúbicos diarios del gas de Vaca Muerta.
También se espera que para esa fecha se ponga en marcha la reversión del Gasoducto Norte, para transportar el gas de Vaca Muerta al centro y norte argentino. Este proyecto ya cuenta con financiamiento confirmado de la Corporación Andina de Fomento (CAF), por un total de 540 millones de dólares.